Buenos Aires, Argentina.

Contrariamente a lo dicho por el presidente Alberto Fernández, el IFE no ha conseguido auxiliar al sector del trabajo informal y de hecho ni siquiera ha podido llegar a ellos. Este sector integrado por ciudadanos que obtiene su ingreso a través del trabajo diario; no cuenta con ningún beneficio o ayuda a diferencia del grupo de la Asignación Universal por Hijo que si comprende una entrada fija de manera mensual y ademas ya ha sido beneficiado por esta medida.

En Argentina la cuarentena obligatoria inicio el 20 de marzo y tres días después en el marco de la emergencia sanitaria el gobierno anunció el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE). Una medida que pretende ayudar a los sectores de trabajos informales, de casas particulares, monotributistas sociales y monotributistas de las categorías A y B.

La normativa contempla un bono de 150 dólares americanos, cuyo valor en moneda local asciende a diez mil pesos argentinos. Así pues fueron habilitadas para el cobro 7.854.316 personas. Sin embargo, en los primeros días de abril solo 2.389.764 han recibido el bono del IFE y pertenecen al grupo de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y de Embarazo.

Es importante subrayar que el monto mínimo que la AUH entrega mensualmente a cada descendiente (febrero 2020) es de $ 2.746 y el máximo es de $ 5.924. Además; son beneficiarios de manera exclusiva y automática de la tarjeta alimentaria, derivado del programa Alimentar. Esta, dispone de un monto de entre 4.000. (Un menor) y 6.000. (Dos o más menores) pesos mensuales para la compra de todo tipo de alimentos, exceptuando las bebidas alcohólicas.

Conjuntamente por estos días, se efectuará el pago de la Ayuda Escolar Anual, cuyo monto está entre 2.300 y 4.590 pesos y según Anses, también es exclusivo para los beneficiarios de la Asignación por hijos de entre 4 y 17 años.

El 17 de marzo, el Instituto Nacional de Estadística y Censos de la Argentina, (Indec) presentó el informe técnico sobre la "Valorización mensual de la canasta básica alimentaria y de la canasta básica total del Gran Buenos Aires perteneciente al mes de febrero de 2020".

En este informe el Indec explica los pasos que siguieron e incluso hace aclaraciones sobre la metodología utilizada. El documento aclara que; la Canasta Básica Total (CBT) para una familia de cuatro integrantes (dos adultos y dos hijos menores de 10 años) costó en febrero $40.789,67. Al mismo tiempo, la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que define el nivel de indigencia, tuvo un valor de $16.785,87.

La Canasta Alimentaria está compuesta por el total de artículos que reúnen los requerimientos calóricos y proteicos necesarios para un "adulto equivalente", mientras la Canasta Básica Total incluye estos alimentos más el costo de servicios públicos y otros gastos (ropa, artículos del hogar, etc.).

Según la entidad oficial, un varón adulto, de entre 30 y 60 años, de actividad moderada, requiere $5.432,32 para cubrir durante un mes sus necesidades alimenticias y $13.200,54 para satisfacer su consumo básico general. Ese es el "adulto equivalente" que se utiliza como referencia para calcular las necesidades del resto de las personas, según sexo y edad.

En consecuencia a lo expuesto, podemos decir que tenemos ante nosotros, dos grupos emergentes del contexto de encierro. Por un lado tenemos a un sector con determinadas características, que se posiciona como el más beneficiado. Y por otra parte tenemos al grupo por el cual se creó el IFE y resulto ser el menos beneficiado.

El grupo real de informales es la que no pertenece al universo de las asignaciones y asciende a un total 5.464.552 personas. Sin contar al sector que obtuvo la negativa del Anses, el cual intentará participar en el segundo llamado a través de un reclamo online que habilitará la institución luego del pago a todos los seleccionados en esta primera instancia.

El legítimo grupo de trabajadores informales aun espera obtener tener los $ 10.000. Ya que fueron relegados y han prolongado la gestión a través de múltiples situaciones y requisitos que fueron anunciados sobre la marcha a través de la institución encargada de pagar.

Uno de los puntos que demuestra la desventaja de esta fracción es la condición exigida de no tener ningún tipo de beneficio o ayuda económica para acceder al IFE.

Asimismo al no pertenecer al círculo de la AUH tampoco puede acceder a ninguna de las prestaciones otorgadas por el gobierno.

Por lo tanto y a pesar de la buena intención del estado, este grupo de informales queda por debajo de la línea de la indigencia y en algunos casos de la pobreza. A esto agregamos, que ya ha pasado casi un mes del anuncio, y como si fuera poco le sumamos la viveza criolla argentina, la inflación de los precios en algunos productos básicos.

Sin duda solo es cuestión de tiempo para que la población comience a reclamar esta brecha emergente del modo de asistir a los más necesitados ya que el gobierno extendió la cuarentena obligatoria y eso puede significar que los ingresos de ciertas familias siguen dependiendo del estado.